A comienzos de 2024, Mushroom Protocol ya cuenta con 3 proyectos confirmados para tokenizar, con los que revolucionará el desarrollo de las ciencias descentralizadas (DeSci) en Latinoamérica. Uno de ellos es Landopp, startup de I+D+i de origen uruguayo, cofundada por Pablo Surazsky, Pablo Kohan y Maria Laura Fernandez Dure.

Una de sus investigaciones más importantes es liderada por Diego Fort, Doctor en Química Orgánica de la Universidad de la República (Uruguay), la cual está centrada en la modificación y utilización de biopolímeros con fines industriales. Particularmente, esta investigación se enfoca en desarrollar un material plastificable 100% orgánico y biodegradable a partir de biomasa de cáñamo, presentando una alternativa sostenible a los plásticos tradicionales.

El objetivo es crear un material con propiedades físico-químicas óptimas para reemplazar al plástico convencional en diversas aplicaciones, generando un impacto ambiental positivo al reducir la contaminación por residuos plásticos no biodegradables.

En la actualidad, esta investigación se encuentra en una fase inicial de investigación y desarrollo de prototipos experimentales. Y con el potencial de las ciencias descentralizadas (DeSci), más personas podrán aportar en esta innovación.

La motivación de Landopp es clara: contribuir a un futuro más sustentable mediante soluciones innovadoras a través del desarrollo de biopolímeros, lo que está estrechamente relacionada con la visión de Mushroom Protocol.

“Nos impulsa ser parte de Mushroom porque comparten nuestra visión de democratizar la ciencia para el bien común. La biotecnología permite solucionar problemáticas reales de forma creativa, y es apasionante ser parte de esa búsqueda”.

A finales de 2023, Landopp ha decidido tokenizarse a través de la plataforma de Mushroom Protocol. Con esto, cualquier persona podrá invertir en el proyecto y ser parte de la solución a la problemática de los residuos plásticos no biodegradables.

Este proyecto tokenizado no solo representa un hito en la investigación científica, sino también un compromiso con la innovación sostenible y la democratización del conocimiento en beneficio de todos.